Ya falta poco para terminar este mes de julio que está pasando rápido como un suspiro, en el huerto todo marcha a su ritmo, que en esta época del año suele ser bastante rápido también.
Ya no plantaremos nada hasta septiembre cuando pase un poco el calor, excepto las alcachofas que se plantan en agosto, y ha llegado el momento de disfrutar recolectando.
Junto a estos tomates pera, una planta de albahaca, aconsejable para ahuyentar a bichillos poco deseables.
El cártamo, una planta de la famila de los cardos, originaria de la India pero que se cultiva en todo el mundo, sus bonitas flores se usan como colorante, como sustituto barato del azafrán, lastima que los caracoles hayan acabado con buena parte de las plantas que sembramos...
En el huerto compartimos espacio con muchos bichillos, algunos de los que rondan en esta época son las libélulas, cómo esta que posó así de simpática para la cámara.
No todos los bichillos que pasan por el huerto son tan inofensivos como este, por la zona rondan un grupo de jabalies que en dos noches arrasaron con toda la plantación de maiz sin ni siquiera haber podida probar una sóla mazorca.
Cosas que tiene el campo.
Lo mejor de todo, al caer la tarde, es poder disfrutar de unas pipas que nos han dado unos generosos girasoles, mientras comtemplamos una bonita puesta de sol.
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